La Reforma Laboral cumple su primer año

[12 februari 2013]

LA REFORMA LABORAL CUMPLE SU PRIMER AÑO

El 10 de febrero de 2012 el Ejecutivo aprobaba en Consejo de Ministros una reforma del mercado laboral, sin la aprobación de los agentes sociales, cuyo principal objetivo era, según el Gobierno, frenar la destrucción de empleo ofreciendo a las empresas más instrumentos para flexibilizar las condiciones laborales y evitar así los despidos.

Un año después todos los colectivos valoran si se han cumplido los objetivos. Intentemos exponer sus puntos de vista:

La patronal la ve positiva. En la CEOE, la valoración sobre la reforma laboral es favorable, aunque piensan que se debe seguir avanzando en medidas de flexibilidad que garanticen la capacidad de adaptación de las empresas y que posibiliten la creación de empleo tan pronto se produzca la recuperación económica.

Por su parte el Gobierno mantiene su postura, diciendo que ya avisó desde un principio que la nueva legislación tardaría tiempo en tener efectos positivos. Algunos ministros, como los titulares de Economía, Luis de Guindos, y de Empleo, Fátima Báñez, han asegurado que sin la reforma se hubieran destruido más puestos de trabajo.

Los sindicatos en cambio se han mostrado más reacios, UGT la llega a definir como “una máquina de destrucción de empleo” que ha llevado al empeoramiento de las condiciones laborales de los trabajadores.

Los trabajadores también han manifestado su disconformidad con la reforma durante el año 2012 al secundar las huelgas generales. La primera, el día 29 de marzo, que se convocó como protesta por la reforma y con el ánimo de frenarla, fue seguida por 10.465.139 asalariados, un 77%, según los datos facilitados por los sindicatos.
La segunda huelga, tuvo lugar el 14 de noviembre y también se la conoce como huelga europea o huelga general ibérica, por haberse convocado simultáneamente una jornada de paros en diferentes estados. Chipre, Malta, Portugal, Italia y España vivieron una jornada de huelga general que fue apoyada con movilizaciones en Francia, Grecia y sectoriales en la Bélgica francófona. En España tuvo un seguimiento de 9.185.383 asalariados, un 76,7% según los datos facilitados por los sindicatos.

Por último veamos los datos, según la última Encuesta de Población Activa (EPA), hay en España 5.965.400 parados, la cifra más alta de la historia, lo que supone 850.500 puestos de trabajo destruidos en este último año y 691.700 desempleados más.

Esto se traduce en que el ritmo de pérdida de empleo fue mayor en 2012 que en 2009, año en el que la recesión fue más aguda desde el comienzo de la crisis. En aquel año, por cada punto de caída del Producto Interior Bruto se destruyeron unos 330.000 empleos. En 2012 la cifra superó los 600.000 por punto de caída.